
Tambien es el momento para delimitar o planear las dimensiones, forma y distribución de los bancales de cultivo, caminos, zonas reservadas a semillero o almácigos, cajón o caseta de herramientas, compost, etc. Para esta tarea es imprescindible primero papel, lápiz y cinta métrica, y después una cuerda, estacas y martillo o maceta.


Después tendremos que cavar más a fondo la tierra, con la hazada o con una motoazada o mula mecánica a la que se ha acoplado una fresa-retovator. En esta fase es preferible que la tierra no se encuentre ni demasiado seca y dura, ni embarrada o excesivamente húmeda. Despues aprovecharemos para abonar con estiercol, compost, etc.
Cuando el terreno ha estado abandonado mucho tiempo y lleno de hierbas o arbustos más de un año, podemos intentar eliminar buena parte de las semillas silvestres regándo éste abundántemente. De este modo muchas germinarán al cabo de unos días y podremos retirarlas a mano o volver a labrar de modo que germinen antes de iniciar la siembra o plantación definitiva.
Más información:
- FAO - Factores de manejo en el cultivo del trigo
- FORMAS DE PREPARAR EL TERRENO DE SIEMBRA PARA OBTENER BUENAS COSECHAS
- Huertolandia
- Videos en youtube sobre Preparación del Terreno
No hay comentarios:
Publicar un comentario